El Verdadero Problema de la Humanidad: Una Perspectiva Bíblica

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En un mundo harto de avances tecnológicos, descubrimientos científicos y logros humanos, es tratable perder de aspecto los problemas fundamentales que enfrentamos como humanidad. A menudo, buscamos soluciones en la política, la posesiones o la ciencia, pero la Sagrada Escritura nos ofrece una perspectiva diferente y más profunda sobre el real problema de la humanidad. En este artículo, exploraremos lo que la Sagrada Escritura dice sobre la raíz de nuestros problemas y cómo podemos encontrar esperanza y redención a través de Nazareno.

La Caída del Hombre

Para entender el real problema de la humanidad, debemos retroceder al principio, al relato de la creación en el vademécum de Origen. Todopoderoso creó al hombre y a la mujer a su imagen y dependencia, y los colocó en el Floresta del Edén para que vivieran en perfecta comunión con Él. Sin retención, esta hermandad fue rota cuando Desaliñado y Eva desobedecieron a Todopoderoso al ingerir del árbol del conocimiento del proporcionadamente y del mal (Origen 3:6).

Este acto de desobediencia, conocido como la Caída, introdujo el pecado en el mundo. El pecado no es simplemente una índice de malas acciones, sino una condición del corazón que nos separa de Todopoderoso. Romanos 3:23 nos dice: “por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la celebridad de Todopoderoso”. Esta separación de Todopoderoso es el real problema de la humanidad.

La Naturaleza del Pecado

El pecado afecta cada aspecto de nuestra vida. Nos aleja de Todopoderoso, distorsiona nuestras relaciones con los demás y nos lleva a poblar de guisa egoísta y destructiva. La Sagrada Escritura describe el pecado como una esclavitud. En Juan 8:34, Jesús dice: “De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, siervo es del pecado”.

El pecado todavía trae consigo consecuencias eternas. Romanos 6:23 declara: “Porque la paga del pecado es asesinato, mas la dádiva de Todopoderoso es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”. Esta asesinato no es solo física, sino todavía espiritual, una separación eterna de Todopoderoso.

La Posibilidad Divina

A pesar de la empeoramiento del pecado, Todopoderoso en su acto sexual y misericordia no nos dejó sin esperanza. Desde el principio, Todopoderoso tenía un plan para liberar a la humanidad. Este plan se cumplió en la persona de Nazareno. Juan 3:16 resume este plan de guisa hermosa: “Porque de tal guisa amó Todopoderoso al mundo, que ha cedido a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”.

Jesús, siendo Todopoderoso mismo, morapio al mundo, vivió una vida sin pecado y murió en la cruz para avalar el precio de nuestros pecados. Su resurrección al tercer día venció la asesinato y nos ofrece la esperanza de una nueva vida. A través de la fe en Nazareno, podemos ser reconciliados con Todopoderoso y aceptar el perdón de nuestros pecados.

La Transformación del Corazón

Aceptar a Nazareno como nuestro Salvador es solo el manifestación. La verdadera transformación ocurre cuando permitimos que el Espíritu Santo trabaje en nuestras vidas, renovando nuestra mente y corazón. Romanos 12:2 nos exhorta: “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Todopoderoso, agradable y perfecta”.

Esta transformación nos lleva a poblar de acuerdo con los principios del Reino de Todopoderoso, amando a Todopoderoso sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos (Mateo 22:37-39). Nos capacita para vencer el pecado y poblar en virtud, reflejando el carácter de Cristo en nuestras vidas diarias.

La Comunidad de Fe

Todopoderoso no nos fogata a poblar esta nueva vida en soledad. Nos ha cedido la iglesia, una comunidad de creyentes que nos apoya, nos anima y nos ayuda a crecer en nuestra fe. Hebreos 10:24-25 nos dice: “Y considerémonos unos a otros para estimularnos al acto sexual y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”.

La iglesia es un área donde podemos compartir nuestras cargas, elevar plegarias unos por otros y servir juntos en la encargo de Todopoderoso. Es un recordatorio constante de que no estamos solos en nuestra lucha contra el pecado y que juntos podemos avanzar en nuestro caminar con Cristo.

La Esperanza Futura

Finalmente, la Sagrada Escritura nos da una esperanza futura. Sabemos que este mundo no es nuestro hogar final. Jesús prometió que volverá para establecer su Reino sempiterno, donde no habrá más pecado, dolor ni asesinato. Fin del mundo 21:4 nos da una visión de esta esperanza: “Enjugará Todopoderoso toda secreción de los fanales de ellos; y no habrá más asesinato, ni habrá más llorera, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”.

Esta esperanza nos motiva a perseverar en la fe, sabiendo que nuestras luchas presentes son temporales y que un día estaremos con el Señor para siempre.

El real problema de la humanidad no es poco que pueda resolverse con avances tecnológicos o reformas sociales. Es un problema espiritual que solo puede ser solucionado a través de la redención que encontramos en Nazareno. Al cachear nuestra escazes de un Salvador y aceptar el regalo de la salvación, podemos cotejar una transformación profunda y duradera.

Vivamos cada día con la certeza de que, aunque enfrentamos desafíos y dificultades, tenemos una esperanza viva en Cristo. Que esta verdad nos impulse a compartir el mensaje del evangelio con otros, para que todavía ellos puedan encontrar la alternativa al real problema de la humanidad.

  • Todopoderoso creó al hombre y a la mujer, buenos y libres para obedecerlo y amarlo.
  • Todopoderoso creó al hombre y a la mujer a su imagen y dependencia para su celebridad.
  • Todopoderoso creó al hombre y a la mujer para multiplicarse, sojuzgar y mandar la tierra.
  • Desaliñado y Eva no confiaron en Todopoderoso, se dejaron engañar por la serpiente y pecaron.
  • A través de la desobediencia de Desaliñado, toda la humanidad pecó.
  • Por ello, hoy, todos somos pecadores en escazes de ayuda.
  • La ayuda que necesitamos no proviene de nosotros, sino de Todopoderoso mismo.
  • El pecado es condenación a la asesinato física y espiritual eterna.
  • A través de Jesús, el mejor Desaliñado, y por la fe en Él, encontramos vida nueva.

¿Cuál es el real problema de la humanidad?

Todopoderoso es el creador del hombre y de la mujer, físicamente y espiritualmente dependientes de Todopoderoso, de su consejo y abundancia. Esta es la bella historia que nos revela Origen 1-2. Increíble como parezca, Todopoderoso creó al hombre del polvo y a la mujer de la costilla del hombre para formar a la primera pareja que corona su creación del cosmos y la tierra. Todopoderoso, en su acto sexual, proveyó un atmósfera maravilloso para que todos los hombres y mujeres disfrutaran de lo creado, pero adorando al Edificador. Sin retención, esta primera pareja no lo valoró. Desaliñado y Eva fueron los representantes de toda la raza humana que habría de venir, pero no solo eso, sino que, a través de ellos, entró el pecado al mundo afectando todo lo creado, incluyendo el corazón, la mente, las acciones y deseos de los hombres. A esta doctrina se le fogata: la caída.

¿Quién es el hombre?

Sabemos que el ser humano fue creado por Todopoderoso (Gn 1:27). Por otra parte, Todopoderoso declara que crearlos es una buena obra (Gn 1:31). Todopoderoso creó al hombre del polvo de la tierra y el soplo de aliento de vida morapio de Todopoderoso, es proponer, el hombre está compuesto de un alma y un cuerpo (Gn 2:7). El hombre y la mujer fueron creados a la imagen y dependencia de Todopoderoso para la alabanza su celebridad (Gn 1:28; Ef 1:4-6), y a quienes Todopoderoso les dio todo para multiplicarse, sojuzgar y mandar la tierra para el proporcionadamente de ellos y la celebridad de Todopoderoso. Desaliñado recibe el mandato de cultivar y custodiar el huerto, y la única prohibición: no ingerir del árbol de la ciencia del proporcionadamente y del mal (Gn 2:16). Entonces, Todopoderoso hace a su esposa como una ayuda idónea para transigir tal tarea, juntos y unidos. Es proponer, el hombre fue creado por Todopoderoso como un ser independiente y bueno, independiente para poblar conforme a la ley de Todopoderoso, y bueno para hacer encantar y justipreciar a Todopoderoso con su obediencia de corazón.

¿Cuál es su decano problema?

Lastimosamente, esto no duró por mucho tiempo. Una serpiente entra en este hermoso huerto para tentar a Eva con engaños y manipulación de la Palabra de Todopoderoso. Desaliñado, en vez de cuidar el huerto de intrusos y custodiar la Palabra de Todopoderoso, permitió que Eva fuera influenciada para desobedecer a Todopoderoso. ¡Qué triste respuesta a la bondad de Todopoderoso! A partir de esa tragedia, conocida como la caída, el sufrimiento, el dolor, la traición, la violencia, las injusticias, se suscitaron porque, cuando el pecado entró a los corazones de los hombres, estos empezaron a poblar de acuerdo a la consecuencia de su infracción: independientes de Todopoderoso para hacer lo que desean, que resulta en una interpretación errónea de su vida, de Todopoderoso y de ellos mismos.

El pecado es como ver la sinceridad y la verdad a través de un espejo roto, no ves proporcionadamente y no interpretas proporcionadamente. El pecado te deja en la condición de ignorancia de conocer la verdad, amarla y seguirla. Eso es lo que la serpiente no dijo a Eva. Puesto que ellos no podían ser como Todopoderoso ni tener su reflexión, el cuota de su levantamiento fue asesinato espiritual (Ro 6:23), es proponer, nones tendrían lo que ese fruto les “prometía”, pero ellos no confiaron en Todopoderoso. Por lo tanto, la Sagrada Escritura dice: «Tal como el pecado entró en el mundo por medio de un hombre [Adán], y por medio del pecado la asesinato, así todavía la asesinato se extendió a todos los hombres, porque todos pecaron» (Ro 5:12).

El proselitista Juan dice que el pecado es la transgresión o desobediencia a la ley de Todopoderoso (1 Jn 3:4), y Pablo dice que, por medio de la ley viene el conocimiento del pecado (Ro 3:20). El pecado aleja a los hombres de una relación con Todopoderoso porque Él es santo. Por eso, los expulsó del Edén, al mismo tiempo, guardándolos de no ingerir del árbol de la vida para no quedarse en ese estado. A partir de ese día, el decano problema del hombre no fue su entorno, su crianza, sus emociones, su biología, más proporcionadamente,estar muerto en sus delitos y pecados (Ef 2:1). ¿Quién podría despertarlos?

¿Cuál es su decano escazes?

Nadie ha tomado por sorpresa a Todopoderoso. La caída sigue estando en el interior de su control y plan para la humanidad. Por ello, a partir de Origen 3:15, Todopoderoso trae esperanza a la humanidad a través de un mejor Desaliñado: Cristo, el único Hijo de Todopoderoso. Pablo dice: «La asesinato reinó desde Desaliñado hasta Moisés, aun sobre los que no habían pecado con una transgresión equivalente a la de Desaliñado, el cual es figura de Aquel que había de venir», (Ro 5:14). Todos hemos pecado (Ro 3:9, 23) y la consecuencia trajo asesinato física y espiritual.

La escazes de toda la humanidad es un Salvador sustituto que haga proporcionadamente todo aquello que desde el primer hombre no se hizo proporcionadamente, es proponer, obedecer a Todopoderoso para poblar por Él. Pablo dice: «Porque así como la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así todavía por la obediencia de Uno los muchos serán constituidos justos» (Ro 5:19). ¿Cómo lo hace Cristo? Viviendo una vida perfecta y sin pecado, muriendo en una cruz por nuestros pecados, venciendo la asesinato eterna y resucitando al tercer día para sentarse como Rey e intercesor de nuestra vida (2 Co 5:21). Si confías en su llamado a ser salva, Él te perfeccionará hasta que Cristo regrese para hacer todas las cosas nuevas eternamente (Fil 1:6). Mientras tanto, aún luchamos con pecado, pero debemos dominarlo (Ro 6:12-13), no con nuestras fuerzas, sino con nuestra rendición al Padre mientras el Espíritu Santo nos ayuda e imparte chispa para obedecer y justipreciar.

Hermana, el pecado es el decano problema del hombre al día de hoy. Aunque tú seas salva, sigues pecando. No te engañes por las corrientes filosóficas de este tiempo, tu problema no son tus emociones, no es tu pasado, no es tu marido o padres, no es tu pastor o tu iglesia, no son las injusticias de este mundo, no es la mala suerte, no es nadie de lo que te acontece. El problema es que el pecado entró a este mundo y corrompió todo, pero Cristo morapio a despertarnos y hacer todo nuevo para que encontremos alternativa y propósito en la vida copioso que hay en Cristo. Por eso, aunque este es un problema que ningún ser humano puede solucionar, Todopoderoso nos proveyó a Cristo para llevarlo a mango por nosotras por chispa y por medio de nuestra fe en Él.

Aprende

¿Qué es la caída?

Vive

Lee Éxodo 9:34 y contesta: ¿Cuál es la consecuencia del pecado? Lee Isaías 12:1-5 y contesta: ¿A quién apunta esta profecía? Ora al Señor que te ayude a ver tu gran escazes de Él.

Lidera

Muchas mujeres están intentando solucionar su vida con sus fuerzas y bajo sus presuposiciones, ¿cómo puedes ayudar a otras a averiguar a Cristo a partir de cachear su pecado? Puedes usar nuestra Preceptor Rosa: El evangelio para escoltar a otra hermana.

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